El mandatario de Brasil, de 63 años, «continúa sin fiebre y con una buena evolución clínico quirúrgica», según comunicó el Hospital Israelita Albert Einstein en su reporte diario.
Luego de someterse a una cirugía abdominal hace casi dos semanas, por la cual presentó complicaciones y sufrió un cuadro de neumonía, el mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, continúa con la recuperación, sin fiebre y ya se le permite comer alimentos blandos.
Según informó el Hospital Israelita Albert Einstein en su reporte diario, el hombre de 63 años «continúa sin fiebre y con una buena evolución clínico quirúrgica», y agregó que “el cuadro pulmonar está en regresión y hubo mejoría en los exámenes de laboratorio».
Bolsonaro se encuentra en la unidad de cuidados semiintensivos desde el 28 de enero, cuando se sometió a una reconstrucción del tránsito intestinal para retirarle la bolsa de colostomía que cargaba a raíz de la puñalada que recibió en el abdomen el 6 de septiembre por parte de un ex militante de izquierda.
El presidente presentó un cuadro de fiebre que fue tratado con antibióticos pero, al no mejorar, se le realizaron exámenes que indicaron «una imagen compatible con la neumonía». Por lo tanto, los médicos no han podido establecer una fecha para el alta y aún continúa con las visitas restringidas.
Según lo informado en el último parte médico, «debido a la evolución del tránsito intestinal y la buena aceptación de la dieta líquida, hoy fue iniciada una dieta cremosa, con buena asimilación», mientras que «sigue con antibióticos y la nutrición parenteral», continúa realizando ejercicios respiratorios y se aumentaron los periodos de caminatas fuera del cuarto para evitar una trombosis venosa.
Por su parte, el funcionario se expresó a través de su cuenta de Instagram: «Quiero agradecer de verdad las oraciones de la gran mayoría de la población brasileña. Si no fuese por eso y por la capacidad de los involucrados en mis 3 cirugías en los últimos 5 meses no estaría vivo».
